dissabte, 2 de març del 2013

LUGAR DE REPRESENTACIÓN


En la España del siglo de Oro el teatro fue una de las diversiones principales, representadas en los corrales de comedias, a menudo los patios interiores de alguna manzana de casas cubiertos por un toldo. Empezaban hacia las 2-3 de la tarde en invierno y en verano hacia las 3-4 duraban entre dos horas y media o 3 horas pero concluían antes del anochecer por razones morales y de orden público.
Escenario solía ser sencillo, contaba con un telón decorado y con paneles para ambientar la escena contenían algunas trampas de transformaciones por las que un actor aparecía por sorpresa ante el público. Comedias de capa y espada, damas virtuosas, galanes embozados, criados chismosos y no podían faltar tampoco los duelos de espada. Se cobraban entradas antes de entrar al corral y otras en las localidades de asiento. Frente al escenario había una fila de asientos de iglesia y el resto del patio era para los mosqueteros (gente común). En medio del corral solía haber un pozo y  a veces unas letrinas, los acomodadores o alojeros dónde en verano se vendían agua, fruta y frutos secos.
Desde mediados de la década de 1580 las mujeres ocupaban un corredor especial, llamado cazuela. Las de la nobleza podían ocupar a los aposentos o habitaciones desde donde podían contemplar la función detrás de unas rejas. Las localidades de asiento de los corredores superiores eran ocupadas por regidores, altos oficiales, nobles y eclesiásticos.
Los corrales se cerraban los miércoles de ceniza y se abrían después de pascua, la representación teatral fue al principio fue un ingrediente más del día de fiesta pero si tenía éxito se extendía a los días laborables, martes y jueves al comienzo, hasta llegar a la representación diaria.




Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada